Esta especie pernocta en las aguas de Honduras durante una temporada al año convirtiéndose en una de nuestras especies migratorias.
La especie se
alimenta principalmente de plancton, al igual que otros animales de gran
tamaño, prefieren igual peces, camarones y pescado. Al momento de comer, hace
uso de sus 3000 dientes y es por eso que su peso es de media tonelada.
Usualmente esta especie suele nadar
en aguas con poca profundidad, pues así descansan durante unas horas antes de
regresar al fondo del mar. Así que en ciertas ocasiones se encontrarán en
diferentes niveles del océano.
Otra curiosidad del tiburón ballena,
es que su tiempo estimado de vida es de aproximadamente 180 años, pero debido
al ser humano, la mayoría de ellos fallecen a temprana edad, siendo
considerados una especie en peligro.